La cámara fotográfica, para mí, es un cuaderno de croquis,
el instrumento de la intuición y de la espontaneidad,
el maestro del instante que, en terminos visuales, cuestiona y decide
al mismo tiempo. Para " dar sentido " al mundo hay que sentirse
implicado en lo que se recorta a través del visor. Esta actitud
exige concentración, sensibilidad, un sentido de la geometría.
A través de una economía de medios y sobretodo olvidándose
de uno mismo se llega a la simplicidad de expresión.
Fotografiar es retener el aliento cuando todas
nuestras facultades convergen para captar la realidad huidiza;
entonces es cuando la toma de una imagen se convierte
en una gran alegría física e intelectual.
Fotografiar es, en un mismo instante y en una fracción de segundo,
reconocer un hecho y la organización rigurosa de las formas
percibidas visualmente que expresan y dan sentido a este hecho.
Es poner en el mismo punto de mira la cabeza, el ojo y el corazón.
Es una forma de vivir.
Henri Cartier-Bresson
No hay comentarios:
Publicar un comentario